Con fecha del 26 de octubre, un día antes de comenzar el año electoral, se publicó el 1º de noviembre el decreto que asegura el pago de una canasta en diciembre próximo de 2.898 pesos así como otra de 2.987 pesos en diciembre de 2024, a jubilados y pensionistas que perciben pasividades mínimas.
Por otro lado, el decreto definió que las jubilaciones mínimas en julio de 2024 tendrán un 3% de adelanto. “Se llama adelanto -y hago esta observación- porque, según la norma, las jubilaciones deben ajustar como toda la Administración Central.
Hasta el 2020, esa partida siempre se fijaba en julio y al no descontarse, hacía que la jubilación mínima aumentara más que el conjunto de las jubilaciones. Ahora ese adelanto se descuenta del aumento general que era el 6%”, dijo el representante de los jubilados y pensionistas en el directorio del Banco de Previsión Social (BPS), Ariel Ferrari.
“Entre los años 2007 y 2020 creció el doble, como resultado de la medida de no descontar del aumento del año siguiente. Después vimos que en 2021 el aumento fue de 243 pesos y entre 2022 y 2023 se dio un 3% a mitad del año, que se descontó del aumento del año siguiente. Eso se repetirá en 2024”, dijo a El Telégrafo.
La jubilación mínima actual es de 3,05 Bases de Prestaciones y Contribuciones (BPC) y cada BPC tiene un valor de $5.660. “En 2006 la jubilación era el valor de 1 BPC y llegó al 2019 a 3,1 BPC. Después se contuvo y quedó con 3,09, que sigue congelada y no tiene un aumento diferencial”.
El Telégrafo