"La eficacia y seguridad de esta vacuna confirman que será muy efectiva contra COVID-19 y que tendrá un impacto inmediato en esta emergencia de salud pública", afirmó el jefe ejecutivo de AstraZeneca, Pascal Soriot, en un comunicado.
Esta vacuna -cuyos ensayos clínicos se realizan, entre otros países, en Reino Unido y Brasil- tiene sin embargo una eficacia mucho menor a la de cerca del 95% anunciada para las vacunas producidas por sus rivales Pfizer/BioNTech y Moderna.
Pero utiliza una tecnología más tradicional que la de sus dos competidores, lo que la hace menos costosa y más fácil de almacenar, ya que no necesita ser conservada a una temperatura muy baja.
AstraZeneca estimó en el comunicado que su vacuna es "altamente eficaz" para prevenir la enfermedad, y remarcó que durante las pruebas ningún participante desarrolló formas graves de COVID-19 ni tuvo que ser hospitalizado.
DW